Qué no puede hacer un guardia de seguridad en Chile

Los guardias de seguridad en Chile tienen un conjunto de responsabilidades y deberes que deben cumplir en el desempeño de sus funciones. Sin embargo, también hay ciertas limitaciones en cuanto a lo que no pueden hacer. A continuación, mencionaré algunas de las cosas que un guardia de seguridad no puede hacer en Chile:
1. No pueden detener a una persona sin motivo: Un guardia de seguridad no puede detener o arrestar a alguien sin una razón válida. Solo pueden hacerlo si presencian un delito en curso o si tienen la autorización de la policía.
2. No pueden utilizar la fuerza excesiva: Los guardias de seguridad tienen permitido utilizar la fuerza para defenderse o para proteger a otros, pero deben hacerlo de manera proporcional y razonable. No pueden abusar de su autoridad ni ejercer violencia innecesaria.
3. No pueden allanar propiedades: Los guardias de seguridad no tienen el poder de realizar allanamientos en propiedades sin la autorización correspondiente. Su función es la de prevenir y reportar situaciones sospechosas, y no la de llevar a cabo investigaciones.
4. No pueden portar armas de fuego: En Chile, los guardias de seguridad no están autorizados a portar armas de fuego, a menos que cuenten con una autorización especial y hayan recibido el entrenamiento adecuado. En su mayoría, los guardias de seguridad solo pueden portar armas no letales, como bastones o gas pimienta.
5. No pueden ejercer funciones policiales: Aunque los guardias de seguridad tienen la responsabilidad de mantener la seguridad en un lugar determinado, no pueden ejercer funciones policiales. Esto significa que no pueden realizar detenciones formales ni llevar a cabo investigaciones criminales. Su tarea principal es la de prevenir y reportar situaciones sospechosas.
Es importante destacar que estas limitaciones pueden variar dependiendo de las regulaciones específicas de cada empresa y del lugar donde se desempeñe el guardia de seguridad. Sin embargo, en general, estas son algunas de las cosas que un guardia de seguridad no puede hacer en Chile.
Restricciones para guardias de seguridad en Chile
La labor de los guardias de seguridad en Chile está regulada por una serie de restricciones y normativas que buscan garantizar la seguridad de las personas y la protección de los bienes. Estas restricciones se establecen tanto a nivel legal como a nivel de los propios empleadores, con el objetivo de mantener un ambiente seguro y controlado en diferentes contextos, como empresas, centros comerciales, eventos y espacios públicos.
Una de las principales restricciones para los guardias de seguridad en Chile es la obligación de obtener una licencia de la Superintendencia de Seguridad Privada (SUSESO). Esta licencia es otorgada luego de cumplir con una serie de requisitos, como tener la nacionalidad chilena, ser mayor de edad, no tener antecedentes penales y haber aprobado un curso de formación específico para guardias de seguridad.
Otra restricción importante es la prohibición de portar armas de fuego para aquellos guardias de seguridad que no estén autorizados por la SUSESO.
Esta medida busca evitar situaciones de riesgo y asegurar que el uso de la fuerza por parte de los guardias sea proporcional y justificado. Sin embargo, existen excepciones en casos particulares, como la seguridad de transportes de valores.
Asimismo, los guardias de seguridad deben respetar una serie de normas de conducta y ética profesional. Estas normas incluyen el trato respetuoso hacia las personas, la confidencialidad de la información a la que tienen acceso, la no discriminación por motivos de raza, género u orientación sexual, y la prohibición de recibir regalos o sobornos.
En cuanto a las restricciones a nivel laboral, los guardias de seguridad en Chile deben cumplir con una serie de horarios y turnos establecidos. Esto implica que deben estar disponibles en diferentes momentos del día y de la semana, incluyendo horarios nocturnos y fines de semana. Además, deben acatar las indicaciones y órdenes de sus superiores jerárquicos, ya que su labor está subordinada a la estructura de la empresa o institución para la que trabajan.
Otra restricción relevante para los guardias de seguridad en Chile es la prohibición de llevar a cabo prácticas de vigilancia ilegal, como la intervención de comunicaciones privadas o el acceso no autorizado a información confidencial. Esto está estrictamente regulado por la ley y cualquier infracción puede tener consecuencias legales graves.
Prohibiciones en vigilante de seguridad privada
Los vigilantes de seguridad privada desempeñan un papel crucial en la protección y seguridad de personas y propiedades. Sin embargo, hay ciertas prohibiciones que deben tener en cuenta en el ejercicio de sus funciones para garantizar un desempeño adecuado y legal.
En primer lugar, está prohibido el uso de la fuerza física más allá de lo estrictamente necesario para cumplir con su deber. Si bien los vigilantes tienen la autoridad para detener a personas sospechosas o infractoras, deben hacerlo sin recurrir a la violencia innecesaria. Deben estar capacitados para utilizar técnicas de contención y evitar causar daño físico a los demás.
Otra prohibición importante es la de portar armas de fuego sin la debida autorización y licencia correspondiente. Los vigilantes de seguridad privada solo pueden hacer uso de armas de fuego en casos excepcionales y bajo estrictas regulaciones establecidas por las autoridades competentes. El uso indebido de armas de fuego puede tener graves consecuencias legales y poner en peligro la seguridad de las personas.
Asimismo, está prohibido divulgar información confidencial o sensible a terceros sin la debida autorización. Los vigilantes de seguridad privada a menudo tienen acceso a información privilegiada sobre las operaciones y medidas de seguridad de las empresas o instituciones que protegen. Es fundamental que mantengan la confidencialidad de esta información y no la compartan con personas no autorizadas, ya que podría comprometer la seguridad y el buen funcionamiento de la organización.
Además, está prohibido aceptar sobornos o cualquier tipo de gratificación que pueda comprometer la integridad y la imparcialidad de los vigilantes. Su deber principal es garantizar la seguridad y protección de las personas y propiedades, y cualquier conducta corrupta va en contra de estos principios fundamentales.
Otra prohibición relevante es la de realizar actividades que puedan causar daño o perjuicio a las personas o al medio ambiente. Los vigilantes de seguridad privada deben actuar con responsabilidad y respetar las leyes y regulaciones en todo momento. No deben realizar acciones que puedan poner en peligro la salud o el bienestar de las personas, ni causar daños a la propiedad o al entorno.
¡Recuerda siempre tu rol y responsabilidad!
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